Un pueblo ignorante se maneja con soltura

Esta columna tiene como fin atacar a los gobiernos que prefieren gastar el erario en materiales de guerra, lo que saben, pero no aplican el cambiar fusiles por educación.

Infórmate - Política

2021-04-08

Un pueblo ignorante se maneja con soltura

Columnista:

Lucas Felipe Lara Beltrán 

 

Un pueblo berraco e ignorante. Mientras transcurren los días del 2021, sin darnos cuenta, y sin que las noticias le den el protagonismo necesario, han sucedido cosas como: 23 masacres en las cuales han sido asesinadas 81 personas en Colombia, un aumento mísero del salario mínimo del 3,5 %, es decir, un aumento de 30 723 pesos. Además, Colombia es el país con más asesinatos a líderes ambientales en el país; 64 líderes asesinados desde el último registro.

Un pueblo que lee en promedio 2,7 libros anuales es un pueblo ignorante, pues gracias a la lectura se estimula el cambio de información y el conocimiento; esta falta de conocimiento es lo que lleva a los colombianos a votar por dirigentes corruptos y mafiosos. Es en este momento en el que me pregunto cómo podemos elegir a políticos cuyo nombre esté manchado con narcotraficantes y paramilitares; aquí me abstengo de poner que el nombre esté manchado con guerrilleros, debido a que, siguiendo con los ideales, las guerrillas se crearon para implantar la justicia social, aunque se ha ido perdiendo el significado; algunos políticos entraron a estos grupos, simplemente, para exigir justicia.

Un país en el que a los congresistas les pagamos un salario anual de 413 004 millones de pesos, en el que le pagamos el mercadeo y la publicidad al Gobierno, en el que se invierte menos del 4 % (el menor porcentaje de gasto publico asignado), un país que «invierte» en aviones de guerra teniendo colegios sin los elementos necesarios para regresar a las aulas, un país en el que en los últimos tres años han hecho tres reformas tributarias, un país en el que en un año hubo 91 masacres, un país en el que mataron a más de 6400 personas para hacerlas pasar como guerrilleros caídos en combate. Es un país que no lucha y al que no le duele tanta injusticia, en el que los políticos pueden hacer un sinfín de cosas y en ningún momento se sentirán presionados ni tendrán que responder por ninguna situación que perjudique a los colombianos.

Esta columna tiene como fin atacar a los gobiernos que prefieren gastar el erario en materiales de guerra, lo que saben, pero no aplican el cambiar fusiles por educación. Si Colombia se vuelve menos ignorante no elegiríamos dirigentes políticos como Álvaro Uribe, Francisco Santos, Iván Duque, Sergio Fajardo, Paloma Valencia, María Cabal, Obdulio Gaviria, Ernesto Macías, Federico Gutiérrez, etc. Lo que necesitan y hacen los gobiernos colombianos es tener un pueblo ignor+ante y desinformado para que sigan gobernando los mismos políticos corruptos, ladrones y hampones, que tanto daño le hacen y le hicieron al país.

Además, los políticos también necesitan que las personas sean ignorantes, para que así caigan en las trampas y en las ideas y propuestas populistas. Como en el caso de muchos congresistas que solo están en el cargo para ser peones de su patrón o padrinos políticos; muchas de estas personas únicamente están allí por el dinero y el poder que les otorga este cargo, pero ni siquiera saben las problemáticas que tiene el país. En este momento tengo el nombre de varios congresistas que aplican para este caso, pero no tengo las pruebas suficientes, así que no puedo decir nombres propios.

En Colombia las personas tienen demasiados conocimientos los cuales no se pueden desarrollar a tope por las condiciones que viven o vivieron, entonces me pregunto, ¿cuántas personas que ahora cargan un fusil se perdieron la oportunidad de ser un gran profesional, porque no hay los recursos necesarios?, ¿cuántas personas se ven beneficiadas con un avión de guerra, y cuántas se verían beneficiadas con un colegio digno para aprender?

Duque que critica tanto a Venezuela con la situación de DD. HH. demuestra que no es coherente con sus críticas. Si nos damos cuenta están vulnerando dos derechos fundamentales: el derecho a la vida y el derecho a la educación digna.

 

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Lucas Felipe Lara Beltrán