TOP 5: lo más malo que nos dejó el Gobierno en el 2019

5 puntos para que la gente se agarre del argumento y entienda que la solución a los problemas sociales y políticos en Colombia, en definitiva, no es el uribismo.

Opina - Política

2019-12-30

TOP 5: lo más malo que nos dejó el Gobierno en el 2019

Columnista: Hernán Muriel Pérez

 

2019 no es un año para el olvido, todo lo contrario, es un año para la memoria. Las personas han tomado mínima conciencia de la gravedad que conlleva que la política tradicional gane escaños. Sobre este año, que culmina una década, se deben repensar las esferas públicas colombianas, su sistema, su honra, su forma misma de trabajar. Es sobre el 2019 que los colombianos tienen que analizar el futuro y adquirir conciencia electoral. 

Lo anterior se evidencia con las cifras de popularidad de Iván Duque y de Álvaro Uribe, que cayeron al piso, y no por el azar, sino porque la opinión pública está empezando a entender las desidias y los reproches negativos que causa el uribismo en la política colombiana.

A continuación, un TOP 5 de lo que nos deja este año de Gobierno, para que la gente se agarre del argumento y entienda que la solución a los problemas sociales y políticos en Colombia, en definitiva, no es el uribismo.

 

5. Nos siguen matando

Líderes sociales, excombatientes de las Farc, líderes ambientales, indígenas, personas inocentes. En el 2019 siguieron matando a las personas que desde hace muchos años están denunciando que hay ofensas contra ellos, ataques, intimidaciones.

Iván Duque, con Uribe como referente principal, habló de generar seguridad, habló de mejorar los contextos de violencia y delincuencia, habló de empoderar a los jóvenes con oportunidades y educación: hoy nos sentimos inseguros, lo poco que ha cambiado, ha cambiado para mal.

Mochan cabezas en el Bajo Cauca, amenazan a las poblaciones, el Estado es ausente donde las reglas las ponen los paramilitares o los guerrilleros, hay personas vinculadas a casos de corrupción que tienen cargos gubernamentales importantes. Entonces, ¿cuándo se va a gobernar para mejorar este tipo de cosas?

 

4. Desempleo y dinero mal acumulado

Desde hace décadas, bajo la liberalización económica y los beneficios tributarios para las grandes empresas –también en una supuesta búsqueda de inversión extranjera- los gobiernos han dicho que están estimulando la creación de nuevas oportunidades y vacantes de empleo. Pero, ¿esto en realidad ha funcionado?

En mayo del 2019, el país alcanzó una cifra de desempleo a nivel nacional de 10,5 %, y en las áreas metropolitanas de 11,1 %. Una figura numérica de dos dígitos que hace buen tiempo no se veía.

Iván Duque intenta sopesar la estadística diciendo que la economía ha crecido. Los partidos gobiernistas y el mismo presidente se ufanan del PIB, de la mejoría económica que ha habido en este último año. Pero las cifras que ellos dan, además de entrar en conflicto evidente con la realidad territorial, entran en conflicto con los estudios del DANE, que aseguran que el desempleo está creciendo.

¿Cómo puede ser que la economía esté en crecimiento, mientras el empleo está en decrecimiento? Sucede que las exenciones y beneficios fiscales que ostentan las grandes industrias en Colombia, les brindan nuevas ganancias. Ese dinero, que debería ser invertido en la creación de nuevos empleos, en realidad parece estarse acumulando, fortaleciendo los grupos económicos colombianos, y activando la competencia voraz que pocas veces pueden sostener las pequeñas empresas.

Esto, además, sin tener en cuenta que el PIB del que se ufana el Gobierno es el global, ignorando el PIB per cápita. La diferencia es que el global no tiene en cuenta la especificidad de cada territorio. Si se promedian las ganancias de todos, se desconocen las ganancias tan bajas de unos, en comparación con las ganancias tan altas de otros.

¿Será que sectores como el Urabá están generando un gran avistamiento de PIB en relación con el número de personas que habitan esa zona? ¿O qué decir del Chocó, el Amazonas, la Guajira? Los índices de PIB global que muestran no nos dan respuesta.

 

3. Reforma tributaria

El congresista Gustavo Bolívar lo dijo: 9 billones de pesos se perdieron este año, recogidos con la Ley de Financiamiento aprobada el diciembre del 2018. ¿Dónde están? Si el déficit financiero en Colombia es de alrededor de 2.5 billones, ¿por qué es tan difícil subsanarlo con el paso del tiempo y el aumento que ya se ha hecho en otras ocasiones de los impuestos?

La reforma tributaria se discutió sobre acciones realizadas por los partidos gobiernistas que no eran válidas bajo ningún concepto jurídico que enmarque el actuar de los congresistas; se discutió sobre mermelada y clientelismo para promulgar el elitismo; se discutió sobre la expansión de la brecha económica que puede causar en el país. Nada de eso importó, la reforma pasó y entra en vigencia en el 2020.

 

2. Represión

El inconformismo y la protesta social les ha costado muy caro a las personas, no porque estén protestando de manera equivocada, o con argumentos falaces, sino porque el Gobierno no ha dado un mínimo chance de diálogo real, y tanto desde el Estado local como el nacional, se ha dispersado a la población con agresividad.

El asesinato de Dilan Cruz en Bogotá, la pérdida motriz de Duván Villegas en Cali, la descarada campaña de deslegitimación y desinformación surgida contra el paro, y cada momento de intervención imperiosa del Esmad en las manifestaciones, demuestran lo bajos que pueden llegar a tornarse los contextos de diálogo en Colombia.

En ese orden de ideas, el Gobierno de Duque creó un nuevo equipo coercitivo antidisturbios para ayudar a las autoridades locales cuando “lo necesitaran”. Lo curioso es que ese grupo está compuesto por soldados antiguerrilla del Ejército. Una muestra más de que, lo que el Gobierno busca con la movilización es disuadirla antes que escucharla.

 

1. Antiambientalismo

¡Cansan!, cansan las peleas en torno al fracking, al glifosato, a la megaminería, a la poca regulación de la contaminación de las grandes industrias (sobre todo extranjeras), al comercio por encima del ecosistema, al consumismo por encima del ambientalismo.

Por el medio ambiente se ha tenido que pelear, literalmente, contra el Gobierno. En el Comité Nacional del Paro, un grupo ambientalista fue el primero en oponerse y separarse de la mesa: la actitud antiambiental de este Gobierno, no solo es insultante, sino deprimente.

La gran mayoría de los colombianos pusieron un grito en el cielo en el 2019 cuando el Ministerio de Agricultura autorizó la caza del tiburón sedoso, que en estudios internacionales se encuentra en alerta por la explotación que los humanos han creado contra su especie.

En diciembre le dieron el regalo navideño a la madre Tierra de empezar a discutir el proyecto de pruebas piloto de Fracking; el Gobierno nacional ni siquiera ha ojeado los temas de los municipios víctimas de la catástrofe de Hidroituango; y las frases, adheridas a insólitas peleas por traer de nuevo el glifosato a Colombia en aspersión aérea para cultivos de coca, dejan un desconcierto inminente y desolador.

¿Qué otro punto es necesario resaltar en este TOP de arremetidas del Gobierno de Duque contra su propio país? Deje sus comentarios. 

 

 

( 2 ) Comentarios

  1. NARCOTRÁFICO, COLOMBIA PRODUCE EL 60% DE CACAINA DE LO QUE SE PRODUCE EN EL MUNDO

  2. Este gobierno es intolerante porque no tolera a la oposición ni las manifestaciones del pueblo. No escucha y es arrogante por su posición dominante.

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Hernán Muriel Pérez
Comunicador Social, Periodista Digital, Fundador de Cofradía para el Cambio