Recientemente se difundió una noticia no confirmada, donde se señalaba el posible contagio del reconocido actor porno Nacho Vidal con el virus del VIH, tras supuestamente confirmarse el diagnóstico en una clínica española, rumor que se expandió de inmediato por redes sociales y causó revuelo en la industria del porno, al punto de paralizarla mientras se siguen los protocolos correspondientes.
El actor al ser interrogado a ese respecto, negó rotundamente el rumor y se niega a profundizar sobre el mismo, aumentando la incertidumbre principalmente entre todas las mujeres que han tenido en los últimos meses interacción sexual con él.
Vuelve a ponerse sobre el tapete el tema del uso del preservativo en las relaciones sexuales, siendo este el medio más eficaz para prevenir el contagio de las enfermedades de transmisión sexual, entre ellas el temido VIH.
Remontándonos a los ochenta y noventa, tras el impacto causado con el descubrimiento del mortal virus del VIH y esa estela de muertes causadas por el Sida en todo el planeta, se propició en muchos países la creación de campañas exhaustivas de prevención, que afanosamente estimulaban el uso del llamado preservativo o condón.
Colombia, con una alta tasa en contagio por el llamado VIH, no fue la excepción y el Ministerio de Salud lanzó varias campañas de prevención, que aún después de varios años permanece en la memoria del colectivo.
Creo que todos recordamos la campaña de los famosos pollitos, estratégica y de fácil asimilación entre jóvenes y adultos, su impacto fue muy positivo: ¡Sin preservativo ni pio!
Posteriormente el ministerio de salud y la empresa Marcas-libras, lanzó una nueva campaña en la que se apreciaba a un hombre acostado, desnudo completamente, dejando parte de su miembro viril al descubierto, originando esa imagen, manifiesta molestia e indignación, en cierta parte de los abochornados telespectadores, quienes consideraron inapropiada la emisión de desnudos explícitos en la franja familiar.
Frente a ese comercial prevaleció específicamente la hipócrita aprensión hacia el desnudo masculino, ignorando de tajo su certero mensaje, razón por la cual fue sacado del aire ante el cúmulo de quejas presentadas. Paradójicamente ese mismo comercial obtuvo reconocimiento internacional en el 34 festival de cine y televisión de NewYork .
Hoy en día las campañas de prevención de las llamadas ETS son prácticamente inexistentes o esporádicas, son las empresas comercializadoras de preservativos las que estimulan mayormente su uso.
Preocupa que la juventud de hoy se muestre apática al uso del preservativo, y que el tema del VIH y el mismo Sida sea algo intrascendente para muchos de ellos, erradamente se consideran inmunes, por no estratificarse dentro de los otrora llamados grupos de alto riesgo.
Algunos miembros de la comunidad LGBTQ, igualmente, se muestran renuentes al uso del condón, escudados de repente en los avances científicos que han permitido con eficaces retrovirales barrera, hacerle frente a la incurable enfermedad y alcanzar el nivel indetectable si ya se es cero positivo, razón por la cual VIH y Sida, dejan de ser bajo su perspectiva una amenaza mortal y los lleva a prácticas sexuales promiscuas y sin ninguna protección.
Hace 6 años, junto a una colega periodista realizamos una investigación sobre las costumbres sexuales en Cali, la cual estaba destinada para su publicación en un periódico de reconocida circulación. En dicha actividad de periodismo de inmersión, frecuentamos casi todos los sitios de encuentro sexual reconocidos o no, de la capital vallecaucana.
Nos sorprendió en primera instancia, que las prácticas sexuales en estos sitios se siguen haciendo sin el uso del condón, llámese bar swingers, saunas, videos sex, cines eróticos, prostíbulos, muchas de las personas que los frecuentan, pese a que los preservativos son de acceso gratuito, y que el Sida aún no tiene cura, no los usan.
Es prioritario que el Ministerio de salud vuelva a activar las campañas de prevención en los medios de comunicación, que los libretistas de TV aborden este tema, concientizando su uso a través de los personajes, nunca se ha visto una telenovela, donde previo a un encuentro sexual, se mencione o se use el condón.
Volviendo al tema de Nacho, en la industria del cine porno, tampoco los actores suelen hacer uso del preservativo, por el contrario estimulan en su mayoría las prácticas sexuales, hetero y homosexuales, desprotegidas.
Como suelen decir las abuelas, “es mejor prevenir, que lamentar”.
