Hace algunos años Uribe, que insulta a todo el mundo, le dijo a Alejandro Santos que la Revista Semana hacía un «periodismo coctelero», es decir, un periodismo de relaciones públicas. No recuerdo bien si se lo dijo por las denuncias de Agro Ingreso Seguro o por los informes periodísticos sobre los falsos positivos, lo vi en televisión.
Me impresionó de nuevo esa conocida habilidad de Uribe de ponerle nombres nuevos a las cosas viejas. Yo ya identificaba desde un tiempo esa malsana y lucrativa cercanía de la Revista Semana con el poder político y empresarial del país.
Luego tuve la oportunidad de comprobarlo, cuando trabajé como periodista para algunos de sus Especiales Semana, en donde hacían (o hacen) jugosos contratos con alcaldías y gobernaciones de todo el país para publicar artículos, informes y crónicas destacando la gestión de empresarios y burgomaestres.
Le agradezco a Semana por la oportunidad de aquel corto tiempo. Corto, porque me decepcionó descubrir lo mucho que pagaba una alcaldía por la nota publicada a su favor y mis precarios honorarios por escribirla.
Reitero, hace algunos años Uribe, que insulta a todo el mundo, le dijo a Alejandro Santos que la Revista Semana hacía un «periodismo coctelero», y cuando supe por medio de un informe de La silla vacía que los dueños de Semana (Gabriel Gilinski, Felipe López y María López) tuvieron una comida en el Palacio de Nariño con el presidente Duque y hablaron del tema del posible regreso de la política castrense de los falsos positivos (publicada luego por el New York Times), pensé de nuevo en aquel viejo insulto de Uribe.
¿Qué hacen los dueños de un medio de comunicación como Semana reuniéndose con el presidente de la República para hablar de temas que estaban abordando los periodistas? La sola pregunta es incómoda. Ya saben, la deliciosa y malsana cercanía con el poder…
Lo cierto es que esa comida, imagino que frugal, no debió ser cualquier comida, porque desde ese momento los directivos de la Revista Semana empezaron a tomar decisiones funestas para la libertad de expresión en Colombia.
Primero, al parecer decidieron engavetar la investigación que adelantaba uno de sus mejores periodistas, el señor Ricardo Calderón. Luego el New York Times (sí) hizo lo debido y las consecuencias de ese reportaje todavía las estamos sintiendo.
Segundo, le cerraron las puertas a Daniel Coronell, el columnista más respetado y seguido del país, quien además lleva unos 14 años dándonos lecciones de buen periodismo desde el limitado espacio de una columna de opinión.
Y lo echaron por algunas sencillas, pero incómodas preguntas, como estas: «¿Por qué Semana no pudo concluir en tres meses la verificación de autenticidad de los documentos que pudo hacer el periódico estadounidense en unos días? ¿Semana privilegió su relación con el gobierno sobre su deber de informar a los ciudadanos?».
Tercero, contradijeron las opiniones de la misma presidenta de Publicaciones Semana, María López, cuando dijo que con la adquisición que hacía la familia Gilinski del 50% de la empresa, no resultaría afectada la política editorial. Menos de seis meses después, sacan al respetado columnista Daniel Coronell por cuestionar la malsana cercanía que la revista parece estar teniendo con el Gobierno Duque.
Aquellos hechos y decisiones están impactando negativamente en la revista porque, debido a la indignación ciudadana, ya ha perdido más de 30 mil seguidores en Twitter y está perdiendo otros miles en su página de Facebook.
No creo que la Revista Semana se acabe por eso y que Daniel Coronell no tenga en dónde más expresar sus opiniones o publicar las investigaciones que realice en el futuro, pero lo cierto es que por decisiones de sus directivas se está dañando su prestigio. Incluso en las redes sociales algunos usuarios se preguntan si Semana va camino a convertirse en una especie de RCN en versión impresa.
Hace algunos años Uribe, que insulta a todo el mundo, le dijo a Alejandro Santos que la Revista Semana hacía un «periodismo coctelero». Quién iba imaginar que años después esa naturaleza coctelera del periodismo de Semana obraría de nuevo en su beneficio político.
Gana Uribe y perdemos los periodistas y la ciudadanía en general. Gana Uribe porque odia a Coronell, a las preguntas que hace y los temas que investiga. Gana Uribe y pierde la libre expresión. Gana Uribe y pierde la democracia.
Ahora solo me pregunto: ¿en dónde podremos leer las futuras columnas de Daniel Coronell? A fin de cuentas, aunque es un medio importante, no creo que el periodismo empiece y termine en la Revista Semana.
Semana cae en la red del Uribato y prensa prepago
Lo que hace la plata vamos peor que Venezuela
Tratándose de un artículo. Escrito en primera persona sería bueno que apareciera el nombre del autor
Esto una demostración mas de la censura de prensa que imponen los ladrones de las riquezas de todos los colombianos con su capo a la cabeza, como lo es el genocida de Uribestia
El periodista que odia a Uribe lo calumnia no presenta pruebas de sus denuncias es un asco bien ido sea y Dios quiera que esa porquería no vuelva a aparecer
Estas en lo cierto
Pues UD saben q todos tienen un precio y duque y furibe se los pago la revista semana era muy respetada a hora vale mierda porque se politiquio q desgracia para el periodismo
Y contratan a Vicky Dávila que es la expresión de lo peor del periodismo en este país, politiquería y chanchullera. Qué verguenza
Me parece q semana esta enmermelada
El periodismo independiente y veraz si pierde, pierden los lectores y gana el periodismo coctelero que le gusta a Uribe en donde lo ensalzan hasta convertirlo en gran colombiano, para eso tienen a Blu, w y otros columnista que muestran su falda y poca objetividad. Y en el fondo pierden los verdaderos periodistas
Que buen pensamiento y sobre todo q e.manera de expresar la realidad de manera contundente y decente. Gracias
Gracias a Dios pasó algo descente en este país y sacaron a ese tergiversador mal intencionado coronel de la revista semana, creo que ahora sí es posible leerla. Coronel, Petro y sus secuaces, Santos y secuaces, Santrich y demás cabezillas de las farc, eln … la jep, y usted son una gran desgracia para este país que ha sufrido tanto. La izquierda o comunistas o socialismo del sXXI, guerrilleros, narcoterroristas-asesinos-violadores, bacrim , proxenetas, pederastas y demás criminales deberían ser todos extraditados , no merecen ser reinsertados a la sociedad, sus mentes macabras ya están tan dañadas que no tienen vuelta atrás … Solo algunos guerrilleros rasos podrán tal ves iniciar una nueva vida, pero lejos de la influencia de personas como Coronel o como usted.
Daniel Coronel es un periodista funesto, ensañado con Uribe! Todas sus columnas apestaban a odio y resentimiento, bien por la revista SEMANA que oxigene con nuevos y mejores columnistas!
Este país es un falso Estado. Todo es una farsa.
De los López no era de esperarse otra cosa. Sacaron el talante del padre, Alfonsito, quien en épocas pasadas, siendo la esperanza de niles de ilusos -(MRL)-, les traicionó y dejó sus anhelos en la trastienda. No era de aguardar que optasen por el respeto de la prensa libre, pues eran obvias sus inclinaciones hacia factores de poder. Semana, en manos de estos personajes tiene como rumbo claro servir desviados intereses. La genética casi nunca engaña, trasmite condiciones personales insoslayables. De tal palo tal astilla.
Que gran lección de aprecio por los valores éticos dio Daniel y que menosprecio por los mismos mostraron los dueños del poder económico y sus segundones.
Le recuerdo que Daniel Coronel es muy respetado pero no el mas seguido y desde hace unos años escribe más de lo mismo. Y como plasma en su escrito, ni el periodismo nacío con el y tampoco murira.
Crua cuervos Y te sacarán los ojos…coronel esta un desconocido que se hizo famoso criticando a Uribe y casandose con una familiar de URIBE…una brillante periodista y comunicadora…SEMANA ES VICTIMA DE SU PROPIO INVENTO….SE HA DEMOSTRADO HADTA LA SACIEDAD QUECTODO PERIODISTA O POLITICO QUE QUIERE BRILLAR EN EL ESTRELLATO…ES MUY FACIL…LA COJE CON URIBE…VEA CORTE…SOLTO EL CIEGUITO NARCO…EN MANOS DECQUIEN ESTAMOS LOS COLOMBIANOS..QUE MIEDO….AMANECERA Y VEREMOS…DIJO EL CIEGO…OTRO CIEGUITO…SI WUIERA SE MURIERON LOS ABUELOS…JRO…
Desde principios de este año, la revista Semana empezó a tener cambios, que dieron pistas de que algo estaba ocurriendo. Un mes después me dí cuenta de la venta del 50% de las acciones al Grupo Gilinski (otro grupo multimillonario, banquero y dueño de grandes empresas colombianas, al estilo Grupo Aval),
lo que confirmó la sospecha que tenía con respecto a sus cambios.
La lectura inferencial de la estructura de dicha revista, la cantidad de propagandas y la farándula, entre muchos otros, son algunos de los aspectos que nos ha cuestionado a muchos de los suscriptores.
Uno de los hechos recientes, como es la suspensión del contrato del gran columnista Daniel Coronell, despertó suspicacia en cuanto a la información que estaba circulando en varios medios de información y comunicación; ahora parece que poco a poco todo se va esclareciendo, a la luz de nueva información, como la presentada a continuación.
El cambio de contenido, de ideología y de estructura de la revista Semana es un atentado a los suscriptores, porque ese no fue el producto que nos vendieron. Creo que este hecho amerita una consulta ante la Superintendencia de Industria y Comercio.
Excelente, algún día tenemos donde leer sus comentarios y éste país dé cobardes, y arrodillados qué quieren no sé sepan la verdad seguiremos siendo ignorantes.
No tiene nada de raro que estas cosas sucedan,se vendieron al mejor postor es una lastima que los medios ierdan su independencia y con ello el peridismo investigativo como el caso de daniel coronel que lo hacia con argumentos y todo dentro de la imparcialidad,de uribe se nota el desprecio que tiene por aquellos que no comulgan con sus politicas y su falta de respeto hacia el pais dividiendolo
Creo que Daniel Coronel se enfrentó a un dilema y lo resolvió justamente tal cual es su talante . Dos principios éticos en tensión o en confrontación. La lealtad a la revista semana, que le permitió durante 14 años publicar sus investigaciones y destapar corrupción y delincuencia o su lealtad con nosotros, sus lectores, que nos permitió conocer de sus hallazgos investigativos y privilegio a sus lectores, como era de esperarse de él, y contrario a lo que hizo semana.
Pierde la revista Semana a un grande, valiente e independiente periodista que ha tenido el valor de enfrentarse y no callar las atrocidadesde Uribe.
Arriba Uribe abajo tdo lo q este con el terrorismo de izquierda
COLOMBIA es como la revista Semana y los partidos politicos : proclive al poder de los gobiernos. Cuando se agudizan las contracciones sociales y politicas, se «enconchan» en delirios «democraticos» de la derecha mas perversa, en pro de salvacion de los pobres…ricos que son atacados por un pueblo zafio.
Como seguidor de semana hasta hace 8 años me retiré por su información de opinión abiertamente desequilibrado. Espero regresar a ser suscriptor si nos ofrecen las diferentes opiniones de la sociedad pensante y comprometidas en construír pais para todos los colombianos. El señor Coronel excelente periodista investigador no hizo si no escribir en contra del Presidente Uribe. Este sería un buen momento de abordar otros temas de interés nacional.
El mejor periodista Daniel coronel si tiene quienes lo sigan
Es lamentable vivir en un país lleno de corruptos, dirigentes dictadores disfrazados de democráticos, llenos de odio y ambición desmedida, pero Dios tiene más poder. Todos tendrán su recompensas, de esto estoy seguro, no hay cuerpo que dure cien años ni cuerpo que lo resista, espero y confío en la justicia Divina
Siguen mandando los intocables, se fué Coronel y van por mmàs
Estos son algunos de los aspectos que nos ha cuestionado a muchos de los suscriptores.
Uno de los hechos recientes, como es la suspensión del contrato del gran columnista Daniel Coronell, despertó suspicacia en cuanto a la información que estaba circulando en varios medios de información y comunicación; ahora parece que poco a poco todo se va esclareciendo, a la luz de nueva información, como la presentada a continuación.
El cambio de contenido, de ideología y de estructura de la revista Semana es un atentado a los suscriptores, porque ese no fue el producto que nos vendieron. Creo que este hecho amerita una consulta ante la Superintendencia de Industria y Comercio.
Es triste como Colombiano,,tener que reconocer,,,,que está es la democracia que ellos quieren ,,,que yo acepte,,Manejar un gobierno,,,como manejan los buhoneros sus negocios,,es demostrar que carecemos de un mínimo respeto por un pueblo y su futuro…Prevalecen los negocios y sus ganancias antes que el buen desarrollo social,,político,,económico y moral..¿Hasta cuando Colombia ?
Pienso que es el momento para que todos aquellos que como Daniel Coronell piensan en la necesidad de la información libre de presiones de cualquier índole, se aglutinen y aporten para la creación de un medio que sea capaz de transmitirla. Muchos colombianos nos sentiriamos orgullosos de colaborar en la medida de nuestras capacidades económicas y laborales para su gestación. Me estoy «arremangando» la camisa!
Sólo lo barato se compra con el dinero. La Revista SEMANA, sin ser lo máximo en materia periodística, la salvaban y sostenían algunos de sus columnistas como León Valencia, Daniel Coronel, entre otros; pero se vendió y arrodilló al poder corrupto y manipulador. Muy mal, por la libertad de prensa y el derecho a la información objetiva. Rechacemos y abandonemos a SEMANA.
Aunque no lo crean los dueños de semana, ese giro radical a la derecha les va a salir caro. La salida del periodista Coronel fue un Craso error. Yo por ejemplo no continuaré con la suscripción. Cómo siempre la ultraderecha se salió con la suya y contamina una de las mejores publicaciones que tenía el país.