He intentado imaginarme varias veces de qué moriré.
¿Sufriré un ataque al corazón?
¿Padeceré una enfermedad atroz?
¿Me asesinará un hombre?
—Natsuo Kirino.
Es mi culpa por tener cara, es mi culpa por tener ojos, cejas, pestañas, boca nariz y orejas. Es mi culpa por tener cuello, es mi culpa por tener una cola, tetas, barriga, hombros y ombligo. Es mi culpa por tener piernas, es mi culpa por tener dedos, pies tobillos y rodillas. Es mi culpa por parir, por caminar, por sonreír, es mi culpa por tener pelo y que este se mueva cuando mis caderas lo hacen. Es mi culpa por tener vagina, por no mirarte, por mirarte, por tratar de pasar inadvertida. Es mi culpa por mostrarme, es mi culpa por usar camisas, pantalones o faldas.
Es mi culpa por vivir sola, por andar sola, por andar acompañada, por respirar, y por maldecir. Es mi culpa porque sé hablar, es mi culpa por estudiar, por trabajar, por ganar dinero, por no tener dinero, por dirigirme a alguien, a nadie y a todos. Es mi culpa por tener miedo, es mi culpa por ser valiente, por protegerme, por llorar. Es mi culpa porque no siento culpa, es mi culpa porque soy insegura, porque sé más que tú, porque no estudié, por vivir lejos y es mi culpa por sentir.
Es mi culpa porque subí una montaña, es mi culpa porque uso bikini, es mi culpa porque me visto, porque nací, crecí, soñé, porque soy bajita, porque soy atenta, servicial y peleona. Es mi culpa porque soy independiente, sagaz, tímida, retraída. Es mi culpa porque me visto sola, porque como sola, porque tengo muchos amigos. Es mi culpa porque a veces me dejo el pelo suelto, salgo a correr, porque me gusta sentarme en un parque a meditar, porque me como las uñas, porque me pinto el pelo, porque digo gracias, porque camino descalza, porque me gusta el mar, porque vivo aún con mis padres y porque sí.
Es mi culpa porque me fui a viajar sola por el mundo antes de estudiar, es mi culpa porque tengo un hijo sin papá, es mi culpa porque estoy en contra del aborto y a favor, y no creo en dios, es mi culpa por rezar. Es mi culpa porque me acuesto temprano, porque nunca salgo, porque soy floja, porque fumo marihuana y porque no sé bailar. Es mi culpa porque me baño todos los días, es mi culpa por mentir, por tener los dientes torcidos, por fruncir el ceño y por ser crespa.
Es mi culpa porque soy alta, porque soy pecosa, sumisa y altanera. Es mi culpa por llorar, por tener encías, por saber silbar. Es mi culpa porque no uso medias, es mi culpa porque tengo la piel oscura, y clara y llena de arrugas. Es mi culpa porque soy culpable, me duelen las injusticias y licúo todas las frutas. Es mi culpa porque tengo la piel reseca, porque soy blanca, porque tengo los dientes perfectos y porque mis labios no son rojos. Es mi culpa por respirar cerca de ti, o lejos o adentro.
Es mi culpa por leer lo que leo o por no hacerlo y por brincar y por gemir. Es mi culpa por tener dedos de pianista, es mi culpa por estudiar leyes. Es mi culpa porque me gustan los atardeceres, y la luna y despertar en la madrugada a abrir la nevera. Es mi culpa porque nunca agacho la cabeza, es mi culpa porque no me gustan los uniformes, porque soy aseada, porque no me gusta el limón, porque me gustan los perros, porque vivo con gatos, porque suelto pájaros enjaulados y porque bailo bien.
Es mi culpa porque soy sucia, porque sí y porque no; por todo y por muchas cosas más es mi culpa ser violada, abusada acosada, explotada, encasillada, pero al final siempre va a ser mi culpa porque soy mujer.
Excelente pero te digo algo? Desgraciadamente un hombre nunca va a entender este artículo.
Si. Si lo entendemos.
Siempre encontrarán una disculpa para hacer daño. Lo que nunca ven es que el problema son ellos. Porque creen que tienen derecho sobre lo que somos y lo que sentimos. Por como pensamos y lo que decimos.
Y si somos culpables por creer que ese tipo de imbéciles degenerados pueden llegar a entender que nacieron de una mujer.
Mientras a la mujer no se le de un verdadero espacio en su entorno, siempre será culpa de la sociedad que la excluye y discrimina.
Siempre somos y aunque yno lo seamos, nos y nos hacen sentir culpables de algo hay que tener las bolas bien puestas para no estar callendo en tanto dilema que hay en este confuso mundo.
Me encantó. Gracias :__)
Que lastima que en Colombia y en gran parte del mundo la mujer sea sub valorada. Yo haré lo propio para respetarlas. Un saludo.
Excelente… Un hombre no se da cuenta del daño que podemos hacer a un ser tan maravilloso como lo es la mujer, hasta que tenemos por hija una princesita… Qué bello es el mundo con ellas… Son culpables de que el mundo tenga una razón poderosa para la existencia humana… Abrazos.
Pocas veces se puede escuchar gritar desde las letras. No es tu culpa…perdón, en nombre del mundo
Por ser sujeto y objeto, por ser verbo y sonar a Arjona