El camaleón Duque

Eso de mimetizarse y cambiar de bando, al mejor estilo de Joseph Fouché, parece ser una de las características principales del actual candidato del Centro Democrático, Iván Duque, todo un tránsfuga profesional y puro reptil. Y no precisamente por aquello de pintarse canas para aparentar el recorrido político que no tiene, como si la vejez fuera garantía de experiencia o la juventud de renovación, cualidades todas ausentes en el candidato de derecha que no ha administrado ni la tienda del barrio y ahora quiere administrar el país.

Lo polémico y falso son las propuestas de campaña del señor Duque que dificultan seguirle el ritmo, pues como un camaleón van cambiando a medida que el escenario se lo exige:

1. Matrimonio gay: En el año 2012 el actual candidato presidencial parecía tener una postura clara y progresista en relación con el matrimonio entre parejas igualitarias, asunto que dejó ver con claridad en un tuit donde celebró que el entonces presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, apoyara esta iniciativa. Sin embargo, esta postura ha cambiado radicalmente en el actual debate político, donde el representante del uribismo manifestó, en el debate organizado por Teleantioquia y Semana, ante la pregunta de si estaba de acuerdo o no con el matrimonio igualitario, que sí estaba con la “igualdad de derechos patrimoniales y civiles”, que es otra forma de decir que no está de acuerdo con el matrimonio y la concepción de familia igualitaria.
2. Fracking: Durante un foro con empresarios, el señor Duque dijo que la riqueza del subsuelo era primordial para Colombia, y que no se podía decir que el fracking era malo, que había que explorar esa posibilidad. Sorprendentemente, luego de los repetidos ataques en redes sociales, la apuesta del presidenciable mutó y empezó a decir en cada debate que no haría fracking en ninguna circunstancia, convirtiéndose en el paladín del medio ambiente en medio de la carrera hacia la Casa de Nariño.
   

   Caracol Noticias

    

   

   W Radio

    

3. Dosis Personal: El 5 de octubre del año 2016, 12 congresistas del Centro Democrático radicaron un proyecto de ley a favor de la dosis personal de drogas, donde además se buscaba que el mismo Estado la proporcionara en lugares adecuados, una visión bastante progresista de este tema, proyecto que Iván Duque firmó como autor. Pero para “sorpresa” de todos, el candidato ha dicho en los últimos meses que está en total desacuerdo con la dosis personal y que hará todo lo posible por prohibirla, sin tener en cuenta que este asunto no es del resorte del presidente de la República y que ya ha sido regulado por la Corte Constitucional.
   

   Revista Voces

   

   Canal Uno

    

4. Universidad gratis: En repetidas ocasiones el presidenciable acusó al candidato Gustavo Petro de populista por proponer universidad gratuita para todos, pero en medio de la campaña no tardó en empezar a proponer universidad gratuita para los estratos 1 y 2, presentando una versión moderada de la propuesta de Petro, sumándole además la proposición de un subsidio de transporte para todos estos estudiantes.
5. El que la hace la paga: Una de las premisas en el plan de trabajo del aspirante a la presidencia por el Centro Democrático es la “mano dura” en la aplicación de la justicia que ha defendido con la frase “el que la hace la paga”. No obstante, al ser preguntado sobre si acataría una eventual orden de captura en contra del expresidente de su partido, Álvaro Uribe, el candidato se fue por las ramas defendiendo la supuesta honorabilidad del senador, mostrando que en eso de evadir preguntas es todo un uribista. Del mismo modo, desconoce la legalidad de la sentencia emitida contra el exministro del gobierno Uribe, Andrés Felipe Arias, quien fue condenado a 17 años de prisión por el escándalo de Agro Ingreso Seguro, pues según Duque, Arias no se robó ni un peso. Y finalmente, en las últimas semanas ha custodiado también la honorabilidad del señor Luis Alfredo Ramos, su jefe de debate, quien está cerca de ser condenado a nueve años de cárcel por nexos con paramilitares. Tal parece que, durante su eventual presidencia, el señor Duque se dedicaría a defender la honorabilidad de los miembros de su partido, aún por encima de lo que dicte la ley. “Justicia sí, pero no así”.

Una campaña plagada de contradicciones y fachadas. De plagios, como el de publicidad evidenciado por la revista Semana, donde se muestra cómo el material publicitario utilizado en una propaganda de Iván Duque es una vil copia de un político español:

Para completar tiene títulos falsos presentados a la ciudadanía, donde el candidato uribista manifestaba tener especializaciones en la Universidad de Harvard y que luego de verificarse que esto no era cierto y que constituía una “peñalosada”, la información de la página web del candidato Duque fue modificada:

Es desafortunado observar cómo las ambiciones presidenciales legitiman cualquier cambalache y renuncia de los ideales con tal de sumar votos.

El candidato más joven, que debería representar los valores de la juventud, es en esencia, una vuelta al pasado, pues su Plan de Gobierno está lleno de propuestas que lejos de ser un paso hacia adelante, son un retroceso que poco le conviene al país.

Pero mínimamente le pedimos coherencia, doctor Iván, entre lo que siempre ha defendido y lo que vocifera hoy, pues como usted mismo dijo “no se puede cambiar de principios por cuestiones de partido” y esos principios que usted pregona parecen tan falsos como sus canas, pues los ideales no se transforman al ritmo de las redes sociales y los debates.

Sin sectarismos, pero sin ambigüedades, mensaje del maestro Carlos Gaviria, pero sus ambigüedades son tan evidentes que el mismo Roy Barreras se debe sentir celoso de cómo usted chaquetea cada postura sin vergüenza alguna, a conveniencia y sin remordimiento.

Imagen cortesía de Bermúdez Representante.