Conveniencia Radical

La costa sigue siendo un fortín político para Cambio Radial y para su «oculto»  candidato, Germán Vargas Lleras. Pero, ¿cómo no va a ser así? Si no hay cosa que le guste más a los colombianos –y en especial a los costeños- que el fútbol. La verdad no los juzgo, yo soy un amante de ese hermoso deporte. A los que sí juzgo son los ‘audaces’ políticos de Cambio Radical que no pierden ninguna oportunidad para hacer campaña.

Así lo demostró el actual Alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, fiel a su partido, -que como podrán adivinar es Cambio Radical- el día de la presentación de los refuerzos Junioristas, aquel 19 de junio del 2017. El alcalde no se perdió la presentación de Yimmy Chará, es más me atrevería a decir que fue él quien a título de la alcaldía presento a este gran jugador. Que mejor manera de hacer política, -y de paso asegurar unos 14.000 voticos que estaban ese día en el Estadio Metropolitano-. Cómo los barranquilleros no van a querer a Cambio Radical si les traen tan buenos jugadores, a menos de un año de las elecciones presidenciales. Que hermosa es la política, en especial la colombiana.

Además, cabe resaltar que para la presentación de contrataciones ‘normales’ el señor alcalde ni se asoma por el Estadio. Que conveniencia. Realmente, ese debería ser un principio del partido, pues al parecer varios de los políticos vinculados a Cambio Radical lo utilizan. El claro ejemplo de conveniencia es Germán Vargas Lleras.

El precandidato a la presidencia, en mención, permanece viajando por Colombia, pero ya no entregando casas. Pues, aunque no lo crean, ahora hace campaña de otra manera. Ya no entrega casas, a diestra y siniestra, como hizo en los periodos presidenciales de Santos, ahora va a las casas –o manda a sus voluntarios– a pedir ‘una firmita’. En ocasiones se atreve a decir que es para construir un mejor país, Dios nos salve.

Ya que Vargas Lleras ha demostrado ser una persona muy conveniente a lo largo de su carrera política podría conseguir más ‘firmitas’ si cuando vaya a la costa se pone la camisa del JU-JU, o mejor del Junior de Barranquilla. O cuando vaya a Antioquia se ponga la de Nacional. Y así, por las diferentes zonas del país. De seguro le iría mejor, cumpliría un principio fundamental del partido que lo respalda -así digan que no-, y además conseguiría más adeptos, o bueno por lo menos más firmas.

Solo hay que escuchar las entrevistas de Germán Vargas Lleras en los diferentes medios de comunicación para saber la conveniencia tan radical que tiene. Siete años estuvo al lado de uno de los principales impulsadores de los Acuerdos de Paz (el presidente Santos) y nunca refutó nada. Ahora que percibe que el tablero se inclinará más hacia los candidatos opositores al Proceso de Paz decide cambiar su discurso para poder acercarse más a ‘nuevos’ sectores políticos.

Lástima que públicamente no sea tan bien recibido. Hasta Centro Democrático desconfía de Vargas Lleras eso deja mucho que desear. Por más coqueteo que le ha hecho el precandidato al Centro Democrático, este último no lo ha tenido en cuenta para nada.

¿Uribe lo estará evitando? De ser así no le quedará otra solución a Vargas Lleras que volver a estar de acuerdo con la JEP y todo lo que conlleva el Proceso de Paz, a ver si así alcanza a salvar unas cuantas ‘firmitas’, y hasta de pronto unos ‘voticos’.

La conveniencia política de las personas pertenecientes a Cambio Radical es evidente. Desde el alcalde de Barranquilla hasta el pre-candidato a la presidencia de este partido -así ellos sigan diciendo que no-.

Como votantes debemos percatarnos de estas actuaciones y no incurrir en errores al momento de votar, o firmar. Debemos castigar en las urnas, o en las planillas de firmas, la conveniencia radical de Cambio Radical.

Adenda: Dicen las malas lenguas que en algunas regiones es obligatorio firmar por #VargasLlerasMejor para todos los funcionarios que trabajan en las alcaldías y gobernaciones de Cambio Radical (el que es y no es, al mismo tiempo, el partido de este precandidato). Eso solo deben ser chismes de mal gusto, no creo que un político de la talla de Germán Vargas Lleras caiga tan bajo. Eso esperamos. Aunque cuando el río suena piedras lleva.