Con información de Heidi Ledford en nature.com
Un esteroide barato y comúnmente usado puede salvar vidas seriamente afectadas por la COVID-19. Una prueba clínica, aleatoria y controlada ha encontrado que la medicina llamada dexametasona es la primera en mostrar una reducción en muertes por coronavirus, en la prueba, un tercio de los pacientes en respiradores.
El médico Kenneth Bailllie, de la Universidad de Edimburgo en el Reino Unido, quien hace parte del comité de revisión de la prueba clínica, llamada RECOVERY, lo llamó un “resultado deslumbrante”. El estudio RECOVERY planea mostrar sus resultados pronto y compartir sus hallazgos con las entidades reguladoras en el Reino Unido e internacionalmente.
El efecto de la dexametasona fue más impresionante entre pacientes en estado crítico con ventiladores, aquellos que estaban recibiendo oxígeno, pero sin ventilador también mostraron mejoría: su riesgo de muerte se redujo en 20 %. El esteroide no tuvo efecto en casos leves de COVID-19.
Poco después de que los resultados fueron revelados, el Gobierno del Reino Unido anunció que ha autorizado el uso de dexametasona en pacientes hospitalizados por COVID-19 que requieren oxígeno, incluyendo a aquellos que necesitan respiradores.
Estudio riguroso
Peter Horby, especialista en enfermedades infecciosas en la Universidad de Oxford del Reino Unido y uno de los líderes en el estudio, dijo que es “Un avance significativo”. El uso de los esteroides para tratar infecciones respiratorias como la COVID-19 ha sido controversial, apunta Horby. Los datos de pruebas durante brotes de SARS (Síndrome Respiratorio Agudo) y MERS (Síndrome Respiratorio de Oriente Medio) causados por la familia de los coronavirus fueron inconclusos. Sin embargo, en presencia de los prometedores resultados en RECOVERY, los investigadores sienten que es importante probar el tratamiento en unas pruebas clínicas rigurosas.
Las directrices de la OMS (Organización Mundial de la Salud) y, muchos países, han prevenido en contra de los tratamientos con esteroides para el coronavirus, y algunos investigadores están preocupados por reportes anecdóticos sobre la expansión de la enfermedad en tratamientos de este tipo. Estas medicinas suprimen el sistema inmune, que podría proporcionar cierto alivio en pacientes con pulmones afectados por sobreactividad inmune que se manifiesta en algunos casos severos de COVID-19. Pero, esos pacientes podrían necesitar un sistema inmune completamente funcional para repeler el virus por sí mismos.
El patrón de respuesta con el mayor impacto en casos severos y, ninguno en pacientes leves con COVID-19, coincide con la noción de que un sistema inmune hiperactivo es más propenso a ser nocivo en el largo plazo, en opinión de Anthony Fauci, jefe del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas y Alergias de Estados Unidos.
Fácil de administrar
Hasta ahora, la única medicina que ha mostrado beneficios en una prueba clínica amplia y aleatoria es el antiviral remdesivir. Al final, remdesivir mostró evidencia para reducir el tiempo que los pacientes necesitan pasar en el hospital, pero no un efecto significativo en la cantidad de muertes.
Remdesivir también es de poca disponibilidad. El productor de la medicina, Gilead Sciences de Foster City, en California, ha tomado medidas para incrementar la producción y está disponible en un número limitado de hospitales alrededor del mundo. Esta medicina también es complicada de administrar, debe ser inyectada por un lapso de varios días.
La dexametasona, en contraste, está disponible en píldoras en farmacias alrededor del mundo, un beneficio enorme para combatir la COVID-19 que se sigue extendiendo en países con acceso limitado a los sistemas de salud. Martin Landray, epidemiólogo de la Universidad de Oxford, y otro de los líderes de RECOVERY dijo “Por menos de 50 libras tú puedes tratar 8 pacientes y salvar una vida”, lo que serían unos 240 000 pesos colombianos al cambio actual.
Los hallazgos también podrían tener implicaciones para otras enfermedades respiratorias severas, añade Baillie. Por ejemplo, los tratamientos con esteroides para una condición llamada síndrome de estrés respiratorio agudo también son controversiales. “Esto realmente nos da una buena razón para mirarlo de cerca, porque [reducción de] la mortalidad es un beneficio extraordinario”, además Baillie dice: “Yo creo que esto afectará pacientes más allá de COVID-19”.
NOTA: Este artículo es casi una traducción del enlace referido al principio, cualquier error de interpretación debe ser atribuido a mí únicamente.
Referencia mencionada en el original:
Beigel, J. H. et al. N. Engl. J. Med. https://doi.org/10.1056/NEJMoa2007764 (2020).