Columnista:
Daniel A. Montoya Castrillón
Ronald Padilla, alcalde hasta hace dos años, en el municipio de Usucurí, Atlántico, invitó en un buen día del año 2017 al juez promiscuo de ese municipio, Andrés Rodríguez Cáez, a conocer a su jefe político, esto es al senador y miembro del Partido de la U, Eduardo Enrique Pulgar Daza.
La reunión se llevó a cabo en el apartamento del senador en Barranquilla, a una hora de Usucurí. Pero hasta ahí las cosas parecían normales, o eso, por decir lo menos, pensaba el juez.
Sin embargo, Andrés Rodríguez tuvo precaución y llevó consigo una grabadora. Pues bien, en al menos seis grabaciones de las que quedaron registradas, en una de ellas se escucha decir al senador Pulgar cómo le propone al juez un portentoso negocio.
«Si los manes son juiciosos. Si yo le digo: hey doc esta vaina vale 200 barras. Él me dice: ¿a qué horas y dónde? Así, pa hablar claro. Yo les digo a ustedes la verdad. Aquí hay un negocio… Yo creo… No sé, si ustedes quieren hablar solos».
El primer benefactor de ese negocio se llama Luis Fernando Costa Osío, líder de un conglomerado, que con cuestionables artimañas se hicieron al control de la Universidad Metropolitana de Barranquilla y también aspiran a quedarse con la Fundación Acosta Bendeck y el Hospital Universitario Metropolitano. Las tres corporaciones facturan al año 80 000 millones de pesos.
Por todo lo anterior, y por mucho más es que al senador lo investiga la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia y la Procuraduría General de la Nación. Sin embargo, a Pulgar, intempestivamente, se le aplazan las audiencias cada vez que lo van a acusar.
A pesar de que existen sólidas evidencias, como por ejemplo las grabaciones que logran demostrar que el senador estaba incurriendo en lo que en materia penal se conoce como el delito de cohecho (por dar u ofrecer), pues eso a Pulgar no le impidió aducir que su proceso debería resolverlo la Comisión de Ética del Senado; de la que él mismo hace parte, en razón de que por esos mismos hechos se adelanta una investigación en esa delegación.
De ahí que, el pasado 14 de octubre, la audiencia quedara suspendida, pues él y su apoderado, “Piden que el proceso lo conozca el Comité de Ética del Senado”.
Sin embargo, fue el Consejo de Estado, el que finalmente decidió entregarle la competencia a la Procuraduría General de la Nación y no del modo solicitado por Eduardo Pulgar: a la Comisión de Ética del Senado.
«En el caso que se analiza, aunque la conducta a investigar fue presuntamente realizada por Eduardo Enrique Pulgar Daza, ostentando la calidad o condición de senador, no encuentra la Sala que dicha actuación se haya adelantado en ejercicio de una función congresional o con ocasión de ella», dice la decisión del Consejo de Estado.
Pues bien, solo cuatro meses después de que se conociera la acusación en contra del edil, esto es, el pasado 1 de diciembre, la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia ordenó su detención.
«Tras dictarle medida de aseguramiento, #SalaDeInstrucción de @CorteSupremaJ ordena captura del senador Eduardo Pulgar por tráfico de influencias, en proceso originado en posible oferta ilegal a juez y que también le sigue por delitos de cohecho y violación de topes electorales».
Sin embargo, un mes después de su detención: el 8 de enero, una vez más se aplazaba el juicio disciplinario en contra del senador suspendido Eduardo Pulgar y detenido en la cárcel La Picota de Bogotá. Esta vez, su suerte corría por los pabellones del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), «toda vez que se tiene programado para ese día un mantenimiento en línea de red y configuración de equipos nuevos de cómputo».
Días más tarde, el defensor de Eduardo Pulgar, el doctor Jaime Granados aseguró: «Había una situación con su salud delicada. Nosotros tenemos conocimiento y así lo aportaremos a renglón seguido a esta audiencia un expediente clínico de hipertensión y con problemas de corazón serios», esto derivó en que la audiencia que se tuvo prevista para el 19 de enero, de nuevo quedó aplazada.
Así pues, con la llegada de la nueva procuradora general de la nación, Margarita Leonor Cabello Blanco, con la que, por cierto, existen evidencias fotográficas de su cercanía con el senador Eduardo Pulgar, seis días después: el 25 de enero, de nuevo se suspendía la audiencia en contra de Pulgar, de manera coincidente, una vez que se efectuó el cambio de procurador.
Fuentes:
https://www.elheraldo.co/colombia/capturan-senador-eduardo-pulgar-por-posible-soborno-777137
https://www.youtube.com/watch?v=iDcajV_s2yk
https://losdanieles.com/daniel-coronell/pulgarcito/