Columnista:
Santiago Ospina García
El jueves pasado escuché con estupefacción una entrevista de Julio Sánchez Cristo en W Radio y lo que hicieron en esa emisora me pareció una absoluta falta de ética profesional (se puede escuchar aquí).
El director de “La W” entrevistó al científico estadounidense Amesh Adalja, investigador en jefe del Centro de Seguridad de la Salud de la Universidad Johns Hopkins, cuyo trabajo se centra en las enfermedades infecciosas emergentes, la preparación para las pandemias y la bioseguridad, y que ha trabajado con el Gobierno estadounidense.
Sánchez Cristo lo presentó como una eminencia mundial en la lucha contra el COVID-19. La entrevista fue en inglés. Mientras Julio preguntaba, una mujer interpretaba para los oyentes que no entienden la lengua inglesa. No obstante, una parte fundamental de la interpretación al español fue errónea y el editorial de Julio Sánchez bastante parcial.
Julio le preguntó al joven científico si consideraba que, para un país como Colombia, que en ese momento tenía más o menos 100 contagiados y 0 muertos, la solución era el aislamiento total. Aunque la primera parte de la respuesta fue un poco incoherente (No, es importante recordar que solo porque haya 100 personas confirmadas…), el resto fue totalmente claro. Aquí está la transcripción traducida:
“No, es importante recordar que solo porque haya 100 personas confirmadas… Es probable que haya más personas que tengan la infección que no hayan sido confirmadas. Lo que los países deben hacer es diagnosticar los casos y luego aislarlos durante 14 días si es necesario. No creo que el cierre como se hizo en China o como se está haciendo en Italia sea la forma de manejar este virus. Creo que se puede hacer un distanciamiento social y se puede detener las reuniones masivas para no tener que cerrar un país”.
Sin embargo, cuando la intérprete de La W Radio dio la respuesta en español, omitió la última parte de esta (“Creo que se puede hacer un distanciamiento social y se puede detener las reuniones masivas para no tener que cerrar un país”), fundamental para la audiencia en Colombia y América Latina. A pesar de ello, Julio Sánchez Cristo, quien habla inglés, no hizo ninguna corrección ni completó lo que dijo su subordinada. En cambio, sí salió a defender al Gobierno diciendo textualmente: “No, pues este doctor le da la razón a la ministra del Interior. Tiene las mismas preocupaciones, la ministra, LAS MISMAS PREOCUPACIONES”.
Más tarde, una periodista de La W le preguntó (en español) al profesor por qué él no estaba de acuerdo con el cierre total de un país, a lo cual este respondió:
“No estoy de acuerdo con los cierres porque a menudo violan los derechos individuales de los ciudadanos. Los mismos objetivos pueden lograrse aplicando una búsqueda agresiva de casos [de infectados] y el aislamiento. No se quiere paralizar la economía porque esto tendrá consecuencias negativas. O esto puede pesar más que cualquier tipo de beneficio que se pueda obtener de tal medida”.
Sin embargo, la intérprete no nos transmitió exactamente esa idea. Esto fue lo que dijo:
“Bueno, nos dice [el científico] que porque viola los derechos de los ciudadanos, viola las libertades de los ciudadanos, dice que es una medida muy agresiva que puede traer un efecto muy negativo para la economía, que el aislamiento social puede ser efectivo, entonces no lo cree necesario”.
¿El cierre es una medida muy agresiva? ¿Cuándo dijo el profesor eso? Como se puede ver comparando la transcripción y la interpretación, el científico nunca dijo que el cierre es una medida “muy agresiva”. Usó ese adjetivo para referirse a las medidas que él recomienda: buscar “agresivamente” (drásticamente) nuevas personas contagiadas y aislar a la gente infectada.
Al final, el titular que publicaron en la página de La W fue esta perla: No creo que el confinamiento sea la solución contra el coronavirus: Amesh Adalja. Incluso en este titular hay un error craso: el científico nunca dijo que estaba en contra del confinamiento (isolation), sino que estaba en contra del cierre o bloqueo de un país (lockdown).
No contentos con esa cadena de errores, en la página de La W agregaron esto:
“Sobre el caso colombiano en el que ya hay más de 100 casos y 0 muertes, Adalja dijo que la solución no es declarar la cuarentena porque considera que es una medida muy agresiva que viola los derechos humanos y puede traer muchas repercusiones a la economía”.
Una vez más me pregunto: ¿El científico dijo realmente eso? ¿Habló de “derechos humanos” o de “derechos individuales”? ¿Está en contra de la cuarentena o del cierre de un país? Asimismo, me surge otra pregunta: ¿le corresponde a un científico experto en inmunología pronunciarse sobre la economía de los países y de las libertades individuales de los ciudadanos? ¿Lo invitaron a La W para aportarnos algo como científico o para dar opiniones como ciudadano de Estados Unidos?
Para terminar con broche de oro esta demostración de ética periodística, Julio Sánchez Cristo dedicó los últimos tres minutos de la entrevista a echarle flores al científico estadounidense. En efecto, antes de terminar leyó su hoja de vida y alabó todos sus logros y pergaminos. Me pregunto con qué objetivo y, por el tono que utilizó, parecía estar muy convencido por el discurso de semejante autoridad en Estados Unidos.
No obstante, como los ciudadanos colombianos no debemos tragarnos todo lo que nos cuentan los medios masivos de comunicación de nuestro país, me puse a averiguar qué tan reconocido es Amesh Adalja en el mundo de la ciencia. Y lo que descubrí es interesante. En Google Académico vemos que este investigador estadounidense tiene un total de 678 citaciones. No está mal. Empero, en el mundo hay científicos expertos en inmunología mucho más reconocidos que él. Por ejemplo, Jean-François Delfraissy, quien tiene más de 3 mil citas en Google Académico. Pero, ¿quién es ese tal Jean-François Delfraissy? Pues nada más y nada menos que el profesor francés que dirige el comité científico que aconseja al presidente Emmanuel Macron en cuanto al COVID-19. A diferencia de Adalja, el profesor Delfraissy recomienda el confinamiento de la gente (no solo de los infectados) y el cierre del país.
¿Por qué Julio Sánchez Cristo no invitó a Delfraissy o a otro miembro de los comités científicos de Francia, España, Italia, China u otro país para equilibrar la posición del científico de Estado Unidos? Además, ¿por qué no le preguntó más al entrevistado sobre el tema del aislamiento, de la distanciación social y del cierre de un país? Al final muchos radioescuchas seguramente se quedaron con la idea de que, efectivamente, el cierre de cualquier país (no solo de Colombia) no es aconsejable porque “es una medida agresiva contra los derechos humanos y contra la economía”. Así las cosas, no nos debe de extrañar que en Colombia mucha gente haya tomado lo que está pasando con el COVID-19 tan a la ligera.
Por todo lo anterior, Julio Sánchez Cristo debería tener un poquito de ética periodística cuando le habla al país y al mundo del COVID-19, entre otros temas. La recomendación es que prepare mejor sus entrevistas, que sea imparcial, que le abra los micrófonos a otras voces y que preste un verdadero servicio público a la ciudadanía todas las mañanas. Además, no le vendría mal cambiar de “intérprete”.
Eh! Ni ahogandose ésta mafia dá el brazo a torcer, uno de los brazos del poder es la comunicación éste es uno de los tantos ejemplos de la dictadura democrática.
Es la peor en su especie.
Allá como en la mayoría de los medios de comunicación la ética y la imparcialidad se acabaron con la pauta publicitaria y las invitaciones a los círculos del poder.
Julio Sanchez debe asumir con más seriedad este tipo de entrevistas
Su lamboneria se hace evidente y sesgada
Parece director de comité de aplausos.
Los tarifados de los medios como Cristo solo le interesa lo económico ,la salud es mercantilzada y la ética periódistica se vende al mejor postor
Dijo a María Isabel y al país entero que no necesitan tapabocas! Ah! Prepotencia humana!?
Es evidente la tendencia de la información, manejada por los circulos económicos y sus vasallos, que solo ven hacia el norte. La realidad puede estar en otros sistemas y sitios geográficos, a quienes más temprano que tarde, nos acostumbraremos.
Y a cuentas finales este hijo de puta fastidioso hasta puede que le quepa la razón. .
aquí están pintados los periodistas que manipulan la opinión pública que hacen parte de la oligarquía de los más poderosos de este país aquí están los periodistas mafiosos que dirigen las comunicaciones en este país no son más que unos manipuladores y arrodillados y periodistas de estómago
No es sólo el único error de traducción de ésta emisora sinó también sus clips o comentarios absurdos queriendo ser elitistas que terminan siendo ridículos cómo el de la corresponsal en Miami (Ana). En lo personal pienso que es un periodismo barato que busca protagonismo con entrevistas en inglés dejando la noticia y al oyente nacional de último y sin importar, tanto que le llaman..No me cuelgue Julito..Menos mal que hay mejores emisoras de noticias locales e internacionales que si le dan importancia al suceso nacional sin dárselas de elitistas.
No estoy de acuerdo con la cita crítica que hace el periodista. Yo escuché la entrevista. He sido profesor de inglés por más de 30 años y para mi quedó claro que el confinamiento era una medida agresiva y no muy efectiva para atacar el virus. Considero que detrás del comentario crítico del periodista hay una mala intención de atacar a Julio Sánchez Cristo, hacia la persona y no al periodista, que entre otras cosas, es humano y podría eventualmente, cometer un error e alguna ligereza al interpretar sesgadamente un tema de manera involuntaria
Si usted entiende el inglés, habrá entendido que la interpretación fue erronea. Y habrá notado a inseguridad de la.muchacha (a menudo está insegura y comete errores de.lengua). Julio Sánchez no fue quien hizo la interpretación, pero sí quien condujo en gran parte la entrevista. El resaltó lo que dijo el científico. Y vea hoy: 80 mil muertos en Estados Unidos. Para estos temas lo primero sería contratar intérpretes profesionales.
¿ Para que pedazos de hijos de mil putas si Los borran,porque no les parece o no les gusta?
Y así llevaban rl dedo acusador untado de mierda contra los s demás
Ja basuras..
Si desafortunadamente, en estos últimos meses vemos a este periodista arrodillado a al gobierno de turno, y sin sonrojarse, habla maravillas de los poderosos y todo por la pauta y ni hablar de María Isabel Rueda!!!!
Si Julio Sánchez , es imparcial cuando le conviene , es otro demagogo más de Colombia
Pertenece al sesgo publicitario y económico del país, de ahí el amarre.