Esta semana que recién terminó, fue para nuestro país una semana más de movilizaciones, en las que a los estudiantes y movimientos sociales se sumaron los sindicatos que salieron a marchar en contra de la polémica Ley de Financiamiento del gobierno Duque, medida que, entre otras, busca gravar el 80% de la canasta básica familiar de los colombianos y al mismo tiempo propone eliminar impuestos a los más ricos y entregar exenciones tributarias para “motivar” la generación de empleo.
En medio de las movilizaciones se dieron situaciones repudiables de violencia entre la fuerza pública y “estudiantes”, hechos que hoy tienen a uno de los manifestantes en la ciudad de Bogotá a punto de perder uno de sus ojos por culpa del impacto de un arma de los cuerpos antidisturbios que hoy arremeten en contra de jóvenes que solo están pidiendo educación.
Pero no todo es tan trágico en Colombia, ya que Pastrana, perdón, el presidente Iván Duque, anunció que viajaría a Francia y que participaría en el Foro de París sobre la Paz; durante su intervención en dicho evento internacional, el mandatario señaló que el “acuerdo de paz fue hecho bajo el marco de la CPI y el Estatuto de Roma”.
Con esta ya son dos salidas internacionales relevantes que hace el presidente: la Cumbre de Paz Nelson Mandela en la Asamblea General de las Naciones Unidas y el Foro de París; en ambos magnos eventos, Iván Duque pareciere decir lo que la gente quiere escuchar, pero no la realidad de nuestro país; mientras nuestro presidente decía en Estados Unidos que él era el representante de una generación y de un país que encuentra inspiración en los ideales de Mandela, el presidente ha sido enfático en manifestar a los estudiantes en Colombia que plata para la educación no hay, además no ha querido siquiera atender personalmente a los estudiantes que se siguen movilizando.
Las palabras que emitió Iván Duque en dicho foro sobre el acuerdo de paz y, las que dijo en la ONU, no tienen sustento para un presidente y un partido que durante el plebiscito por la Paz en Colombia decían que dicho proceso era un acuerdo entre el gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC para que en el país hubiese impunidad y para entregarle el país a esa guerrilla.
Lo que al parecer olvidó decir el presidente ante la comunidad internacional es que mientras él habla todas esas palabras bonitas que parecen escritas para otra persona, en el país sus acciones y las de su partido se encaminan a acabar la clase media, a hacer más pobres a los pobres colombianos, a instaurar una dictadura, coartando la libertad, y a aplicar una correlación de poderes que lleve al país a su mítico Castrochavismo, perpetuando en el poder a su líder supremo.
Lo cierto del caso es que apenas se cumplen cien días de gobierno de nuestro flamante presidente y hoy no tenemos un líder o gobernante serio y centrado, sino que tenemos a un hombre que tiene dos caras para hablar sobre Colombia ante una comunidad internacional que, al parecer, no le cree mucho.
Un buen articulo , pero me parece que debió ser mas explicativo en la relación directa que tiene duque con Uribe…
Excelente comparación, e interesante análisis.
Castrochavismo? En serio? No me hagan reír, ahora para uds el dictador es Duque y no Petro si se hubiese posesionado. Estudiantes delincuentes que sacan la gamineria petrista a relucir en esas manifestaciones. Mas bien frenen a Petro que es el autor intelectual.
Muy interesante análisis, sin embargo es preocupante ver cómo hay tantas personas que pese a ver la situación de este país aún continúan haciendo declaraciones sin argumentos, que simplemente no son comprobables, pero realmente a una persona ignorante y mediocre no puede preocuparle la educación,a seres insendibilizados y egoístas que no se preocupan por ir más allá de lo que sus palabras les permite,poco puede interesarles la situación tan repulsiva en que éste presidente pretende dejar nuestra patria.