La polarización que atraviesa el país solo ha llevado la confrontación política a diferentes ámbitos de la vida diaria. Las redes sociales no podían ser la excepción, los usuarios de Facebook y Twitter han convertido cada publicación referente a la campaña presidencial en una oportunidad perfecta para alabar a aquellos que comparten su ideología política o para insultar a aquellos que tienen una postura opuesta, entonces pareciera que se ha vuelto común que las palabras de moda en redes sean: “mamerto”, “castrochavista”, “paraco”, “guerrillero”, entre otra gran cantidad de insultos y descalificaciones.
La confrontación en redes sociales llegó a tal punto, que el pasado 3 de abril del presente año el reconocido caricaturista Julio César González, mejor conocido como Matador, anunció su retiro de las redes sociales debido a que un usuario de la red social Twitter publicó un tuit en el que presuntamente amenazaba de muerte al caricaturista del diario El Tiempo, la publicación decía lo siguiente: “Matador es un canalla, qué falta nos hace Castaño para callarlo”, el hombre ha sido identificado como Ariel Ortega quien militaba en el partido Centro Democrático. Ariel Ortega es funcionario de las empresas municipales de Cali donde se desempeña como conductor desde el año 2007. El hombre en su Twitter además hace referencias al jefe paramilitar Carlos Castaño y además de las amenazas contra “Matador” también ha publicado amenazas en contra del presidente Juan Manuel Santos y el periodista Daniel Samper Ospina.
Después de que se anunciara una investigación por este hecho, Ortega dijo que en su trino él no se refería a Carlos Castaño, él aseguró que se refería a un profesor llamado Felipe Castaño que solía mandar a callar a sus alumnos imprudentes, pero resulta que en otras publicaciones en su Twitter sí se puede observar cómo evidentemente hace referencia a Carlos Castaño, quien fue el autor intelectual del asesinato del periodista Jaime Garzón.
Como el señor Ariel Ortega podemos encontrar muchos bravucones en las redes sociales, y es que las redes sociales se han convertido en el escenario propicio para este tipo de personas, quienes muestran valentía detrás de la pantalla de un celular o computador y se atreven a proferir amenazas y a insultar a todo aquel que piense diferente a ellos.
El señor Álvaro Uribe Vélez dijo en su cuenta de Twitter que rechazaba este tipo de conductas, pero hay que recordarle a el expresidente que él en una ocasión a través de la red social del pajarito, llamó a Daniel Samper Ospina “Violador de niños” y recientemente publicó un trino en contra de Daniel Coronell que fue interpretado por muchos como una amenaza a la libertad de prensa. No solo el señor Uribe, otros personajes de la política Colombiana utilizan las redes sociales para tocar temas controvertidos y algunos de ellos no miden sus palabras y terminan aportando más leña al fuego de la polarización.
Es cierto que hay de parte y parte, las agresiones vienen y van sin importar la ideología política, muchas de esas amenazas llevan un tono elevado con insultos fuertes, las redes sociales son una interesante herramienta de debate, pero se debe debatir con argumentos y no con insultos y descalificaciones y mucho menos con amenazas, además del hecho de hacer apología a criminales y asesinos sin importar la ideología política de dicho nefasto personaje.
Colombia, un país que anhela la paz, no puede permitir que la violencia se haya trasladado a los escenarios digitales, es necesario bajar el tono de las discusiones en las redes sociales y en cualquier escenario de la vida diaria, no se puede permitir que sigamos viviendo en medio de una constante polarización y menos en un país donde pareciera ser que la vida no vale nada.
