¿Otra vez vamos a votar por personas?

Opina - Política

2017-03-25

¿Otra vez vamos a votar por personas?

El voto debería ser razonado, y no tanto sentido, y en mi visión romántica del examen racional de unas elecciones populares, como las presidenciales, el programa de gobierno es lo primero y más importante para analizar y por último las personas; creo que por eso uno se entera después de quiénes serán los ministros, que son los principales ejecutores del programa.

Sí, primero el ideal general, por eso la gente se afilia a partidos y los apoya con sus votos, pero además que eso de la consistencia ideológica en los partidos políticos está en peligro de extinción, no he visto que exista tal cosa como una tendencia ideológica constante en los partidos políticos en Colombia, o Latinoamérica, y menos entre sus políticos participantes. Resulta inverosímil, cuando menos, pensar que hay mucha diferencia entre los 9 partidos con personería jurídica, especialmente si se considera la tibieza de la izquierda latinoamericana.

Pero ya veo que las personas andan pensando en votar por esta u otra persona, o como nos vemos obligados en algunas ocasiones, en quien no votar salvo que aparezca un mal que se considere más grave. Ahí están los resultados de los países que han tenido criterios de votación mayormente viscerales, y todavía no tenemos idea de qué diferencia de intención hay entre unos y otros pre candidatos ¿Será que López Hernández y Vargas Lleras traen propuestas realmente diferentes?

Entonces yo me imagino que, primero uno examina el plan de gobierno, después el partido asociado, y por último los personajes asociados a ambas cosas. Principalmente porque un gobierno no es su presidente, claro que influye mucho pero no es lo único importante y no debería ser lo más importante.

Imagen cortesía de: T13

El gobierno moderno, posterior a los reyes en funciones en mandato, es una institución que tiene un sistema de toma de decisiones racional, y no al deseo veleidoso de algunas personas; por eso creo que el programa de gobierno es lo más importante y lo primero a evaluar, sí eso no parece funcionar o convencer, se descarta; si convence, entonces se examina la factibilidad de realización, así como la capacidad de quién propone y la credibilidad que ostenta.

Triste es que el actual presidente ganó ambas elecciones con apenas muy vagas ideas de gobierno, en la primera parece que decepcionó a los partidarios de Álvaro Uribe Vélez porque no siguió los lineamientos de gobierno de quién fuera presidente cuando Juan Manuel Santos era ministro de Defensa; y en la segunda ganó con la noción de continuar lo que había comenzado, pero el programa propuesto nunca lo vi en ninguna de las dos oportunidades.

Peor aún, no recuerdo que los contrincantes electorales más fuertes del actual presidente tuvieran un programa de gobierno, pero así llegaron a segunda vuelta. Seguramente quienes tenían programas de gobierno, o sus resúmenes, no fueron muy leídos, porque Colombia casi no lee; y así nos va, otra vez vamos a votar por las personas y el peor escenario posible es porque no haya otra opción, porque la clase política no se sienta presionada a enseñar algo más que la cara.

 

 

Claudio Mera
Lector asiduo, estudioso de la administración y la gestión, consultor, docente universitario, cocinero y ejecutivo administrativo. Las opiniones pretenden mostrar una postura lógica.