Más de 6 millones de colombianos demostraron que el odio, la desinformación y el egoismo siguen siendo la gasolina política más potente del país, porque un personaje que se hubiere visto derrotado en las urnas ya en repetidas ocasiones, hoy revive su potencia en nombre de quienes se dejaron influenciar por un discurso que ya tienen muy bien aprendido los promotores de la guerra (porque a ellos no les interesa ninguna paz, y eso lo han dejado claro en repetidas ocasiones también) pero que nos ha sumido en un conflicto cíclico tan enorme, tan antiguo y tan estúpido que se nos normalizó al punto de creer eso de que en Colombia no hay ninguna guerra.
Duele en el alma ver cómo la paz ganó en las zonas más afectadas por el conflicto, mientras los opositores de sofá creen que lograron algo con el No e inundaron las calles pitando desde sus automóviles y camionetas, henchidos de orgullo por negarse al castrochavismo, porque no le entregamos el país a las Farc, cuando el campo ya es de ellos, porque allá el Estado sólo aparece en elecciones.
Cabe volverse a preguntar si esos más de 6 millones que le dijeron No a desmovilizar a los guerrilleros van a coger el fusil para irse al monte en caso de que de reactiven los enfrentamientos.
También es de preguntarse qué pasa por la mente de los colombianos para creer que personajes como Jose Obdulio Gaviria y Popeye, primo y exmano derecha del mayor narcotraficante de la historia del país, son quienes quieren lo mejor para todos. ¿A quién en su sano juicio le parece que Pacho Santos, Oscar Iván Zuluaga y el propio Uribe tratan de proteger al país? Si cuando han gobernado, porque lo hacen y lo han hecho mucho tiempo, han demostrado con creces que sólo les importa salvar su impunidad y la de su gente, porque así digan los uribistas que aquí no pasa nada gracias a la Seguridad Democrática, no pueden taparse hechos tan graves como los falsos positivos, que enlodan por completo cualquier asomo de coherencia en un movimiento que reclama justicia cuando su cabeza tiene más de 300 procesos en contra parados con artimañas y leguleyadas.
Así quieran hacernos creer lo contrario, hoy perdió Colombia. Perdimos por culpa también de los importaculistas, de esos 22 millones de ciudadanos en derecho y deber de votar que se quedaron en la casa quejándose por la situación del país y perdieron la oportunidad de empezar a construir esa Nación diferente que soñamos y tanto necesitamos.
Sólo queda esperar a que la victoria del No se dé para una renegocación y para que el país realmente se una en la consecución de una paz más sólida.
Queda en las FARC demostrar que sí quieren la paz manteniendo voluntad para renegociar y en el uribismo demostrar su interés de país, sentándose a proponer, no aprovechando su victoria para revivir cadáveres políticos y seguir haciendo de las suyas.
Adenda: La victoria del No deja totalmente claro que el problema de Colombia no son las Farc, sino sus gobernantes manipuladores y su pueblo ciego. Ojalá que este traspié sea la oportunidad de unirnos y comprometernos aún más con la consecución pacífica y negociada de la paz, y no sólo con las FARC.
Ya no quedan palabras para decir que todo lo que dices es cierto, tus palabras no revelan ya nada nuevo, tus palabras son eco de muchas dichas muchas veces, seguir diciéndolas no cambia nada, Colombia no votó por el NO, Colombia no votó contra las FARC-EP, Colombia esquizofrénica -como diría Mujica- votó por Álvaro Uribe Vélez y su proyecto maniático de nación, Colombia se volcó hacia la locura, mujeres desgreñadas, hombres perdidos, todos deambulando por este país como almas famélicas y obtusas votaron por su egoísmo y su profundo miedo a un mundo mejor, un mundo donde ell@s no ostentan cache porque los demás tendrían la posibilidad de una vida con algo de dignidad, Colombia no votó por el NO, votó porque los otros, no tengan condiciones para no ser dominados.
Saludos desde Venezuela. No te rindas amiga Lucrecia, sigan luchando por la paz que es el único camino, lo demás es atraso, muerte y destrucción. No hay que darle oportunidad al enemigo que nos lleven a su territorio que está plagado de odio y muerte.
Ellos pretenden destruir a quienes piensan diferentes, no los ven como adversarios con derecho a exponer una visión diferente sino como enemigos a los que hay que destruir. Todos somos hermanos con idénticos derechos ante Dios y ante las leyes del Hombre (y la Mujer) pero con diferentes puntos de vista y modos de pensar.
Permíteme discrepar de tu apreciación cuando dices: «Colombia se volcó hacia la locura». No creo (por el alto porcentaje de abstención) que la mayoría de la población esté convencida de que votar por el Sí sería la peor opción.
La gran influencia de los poderosos medios de difusión (de desinformación) que ejercen sobre la psicología de la sociedad puede tener mucho que ver en la toma de decisiones y en la movilización de la gente.
los peores ciegos son los que andan señalando de ciegos a los demás, pobre Ian, mira como se devuelven las cachetadas, ojala un día aprendamos, ojala, pero no lo creo, necios hasta el final, nos la pasaremos acusando al otro y nunca tendremos el valor de mirar nuestra propia podredumbre, esta pobre nota, no es mas que la interpretación simplista de un perdedor resentido.
Ian, qué mal raciocionio, eso es muy corto lo que opinas… te recomiendo otro artículo de aqui mismo, http://conlaorejaroja.com/que-paso-el-domingo/ , los que hablan como tú son mas papistas que el Papa, son de los mismos que nos han dicho groserias en redes sociales dizque en nombre de la paz… olvídate, qué falta de respeto, tú crees que uribe hipnotizó a todo el mundo… por favor, pocos se sientes representados por él incluyéndome, pero no me como el cuento banal del Sí con ese abuso tan tenaz de publicidad, ¿Cuanta publicidad viste del NO? Cuanta del SÍ? totalmente desigual, estas farc no se merecen lo que lograron, se ve que no has vivido los años que otros sí hemos vivido, el terror en que nos mantuvieron en el campo y la ciudad, y ahora no vas a decir que es que somos paramilitares… aunque no se me hace raro, corto de pensamiento…
Estos personajes como Ian se creen dueños del bien y el mal por q posiblemente su educación así se lo ha permitido,posiblemente los uribistas,los cristianos,los católicos y todos los q se sintieron impulsados a votar por el NO,no tengan tu misma educación,pero d algo si estoy seguro, y es q toda esa gente no es estupida,yo creo en el perdón,pero del q se arrepiente y está dispuesto con humildad a pagar el precio,ni si quiera Dios contempla un perdón automático para ningún penitente,si no,q despues d ejercer su fe es q puede ver el milagro del perdón…Para muchos idealistas y materialistas estas palabras pueden sonarle banales d un fanático,pero para mi son principios eternos q no son negociables con nadie ahora ni en ningún tiempo, asi es q no piensen q 52 años d crímenes cometidos por un grupo criminal indolente,podrán olvidarse en cuatro años d intentar culpar al estado y ala sociedad d sus crímenes>